A inicios de abril, la Embajada de Estados Unidos en Ecuador anunció el proceso de renovación de visas de turismo, sin necesidad de una entrevista presencial.
Esto aplica para las visas B1/B2 emitidas en territorio ecuatoriano y que estén vigentes o que hayan caducado en los últimos 48 meses.
Francisco Sánchez, es asesor de asuntos consulares desde hace varios años, en la oficina Metal Madness, ubicada en las calles 9 de octubre y García Moreno.
Desde esta dependencia, el consejero hizo un llamado a las personas interesadas en estos trámites, para evitar el cometimiento de errores e incluso el bloqueo de la clave de acceso a la página de la embajada americana.
“Es preferible que reciban la orientación adecuada de gente con experiencia en estos procesos”.
Así, por ejemplo, manifiesta que quienes hayan aplicado para una renovación y tenían una cita para finales 2022 o 2023, lo que deben hacer es cancelarla.
“Les corresponde activar la opción: Envío de Documentos y esperar la llegada de un correo electrónico donde los americanos les confirmen la entrega de sus papeles en el edificio Torres del Norte”, precisa.
A su criterio, en esta parte del trámite, es fundamental la asesoría.
“Por un error, en lugar de favorecerse pueden terminar perjudicados. Si no pone la Cancelación de la Cita y se usa la opción Reprogramar, esto le va a dar largas al proceso, ya que le darán fechas posteriores”.
Sánchez también indica que a veces se da un exceso en el uso de la clave, lo cual termina bloqueándola.
Destrabarla, según su experiencia, es más complicado y este es un error frecuente.
Una vez que el interesado cancela los $ 160 correspondientes a la tasa, ya puede entrar al portal de la embajada para crear una cuenta y solicitar el envío de los documentos. La respuesta a esta último puede tardar horas o hasta 5 días.
Los documentos que va a entregar son: la hoja de confirmación, la hoja de autorización de envío de documentos, el pasaporte y una foto de 5 x 5, tomada recientemente.
No es necesario, de acuerdo a lo manifestado por Sánchez, añadir información sobre cuentas bancarias, referencias laborales y otras.
“Si el delegado consular ve una inconsistencia y se lo convoca a una cita no hay que preocuparse. Puede suceder por varias razones como, por ejemplo, el cambio en el estatus de la persona o porque se le debe tomar otra vez, las huellas dactilares”, refiere.
Lo otro, afirma, es cuando un ciudadano que viajó como turista, se quedó más tiempo del permitido. Así mismo, si se quedó trabajando o estudiando algún curso o maestría.
Para esto último existen las visas respectivas. En el caso de trabajo es más fácil solicitarla con el envío de un contrato de la persona que lo desea llevar a laborar.
En lo educativo, también hay la opción para pedir ese documento con fines de capacitación.
“Hay personas que dañan sus papeles porque se quedaron laborando. Del mismo modo, existen instituciones allá que les dicen que pueden estudiar por varios meses con la visa de turismo. Eso no es cierto. No afecten a su documento de ingreso a Estados Unidos”.
Al momento, según Sánchez, existe una extensión de 48 meses para renovar la visa, sin una entrevista con el funcionario del consulado.
El consejero exhorta a las personas que se encuentran en esa condición, para que hagan el trámite y obtengan el documento automáticamente.
“Si dejan pasar el tiempo corren el riesgo de que les toque presentarse como si fuera la primera vez”, subraya.
En el caso de las personas que deseen pedir visa por primera ocasión, Sánchez manifiesta que la cita la están dando para el 2023
“Esto podría cambiar, pero depende de las condiciones sanitarias y que en el consulado haya las personas necesarias para atender las solicitudes”. (I)
Portada, fotografías y videos: Atarazana Go!